El tordo (turdus philomelos) es un ave de vuelo potente y recto que normalmente vuela en solitario. Solo forman grandes grupos al anochecer.
Es reconocido también por su particular canto. Su nombre específico philomelos se refiere a un personaje de la mitología griega, Filomela, cuya lengua fue cortada pero que luego fue transformada en un pájaro cantante.
Crían en Europa central y septentrional. Realizan de 2 a 4 puestas de 4 a 6 huevos cada una y son incubados por la hembra durante 15 días.
La migración se realiza en pequeños grupos durante las noches de luna llena. Cuanto más al norte viven los tordos más fuerte tienen el instinto de migración hacia el sur. Algunos individuos se han vuelto urbanos en los países de cría y han formado poblaciones sedentarias que ya no emigran.
La alimentación del tordo es variada: caracoles, gusanos de tierra, lentisco. Es curiosa la costumbre instintiva de romper los caracoles con una piedrecita. Cuando el sol se pone buscan las masas forestales para pasar la noche.
Los ejemplares que llegan a Baleares proceden de Europa central, Alemania y Polonia, de la costa báltica, Estonia, Letonia y Lituania, de Finlandia y, en menor proporción, de Noruega y Suecia. Raramente de Europa del este.
Son migradores nocturnos. Durante el día descansan recuperando fuerzas y comiendo. La migración empieza a mediados de septiembre, siendo muy fuerte en octubre. La migración de vuelta hacia las zonas de cría comienza en febrero.
Los tordos se cazan:
– con escopeta: a la mala (disparando directamente a los tordos mientras el cazador va caminando), desde un puesto fijo (esperando sentado a que los tordos se acerquen) o con reclamo (imitando su canto)
– con “filats”: Las zonas de entrada y salida de una masa forestal que utilizan los tordos son conocidas por los cazadores. A estos pasos se les llama “colls”.
Hay tres tipos de caza según la hora del día: d’alba (esperando que salgan los tordos cuando es de noche), de gran día (hasta media mañana) y d’horabaixa (en el camino que los tordos utilizan cuando se van a dormir).
El número máximo autorizado de capturas es de 18 por día.
Fuente: Consell de Mallorca
INGREDIENTES:
- 12 tordos
- 800 ml. de caldo (o agua)
- 1 trozo de longaniza (sobrasada)
- 1 butifarrón (botifarró)
- 6 setas
- 12 hojas grandes de col
- 2 cebollas
- 2 tomates
- Pasas
- Piñones
- Aceite
- Sal
- Pimienta negra
- Laurel
- Picada de ajo y perejil
ELABORACIÓN:
Tenemos los tordos limpios, desplumados y sin vísceras.
Ponemos en el fuego una olla con agua y cuando hierva introducimos los tordos. Los dejamos hervir durante 6-7 minutos. Transcurrido el tiempo los sacamos y reservamos.
En otra olla más grande también hacemos hervir agua. Cuando empiece a hervir introducimos las hojas de col, apagamos el fuego y tapamos la olla. Dejamos escaldar la col durante unos quince minutos.
Ponemos un poco de aceite en una olla de barro. Lo ponemos al fuego e introducimos la cebolla que hemos cortado muy pequeña. Añadimos las 2 hojas de laurel y dejamos que la cebolla se vaya haciendo a fuego suave.
Partimos por la mitad los tomates, les quitamos las semillas y los rallamos.
Cuando la cebolla está pochada incorporamos el tomate rallado.
Añadimos sal y un poco de pimienta negra. También una picada de ajo y perejil.
Mientras se va haciendo la salsa cogemos los tordos, los salpimentamos ligeramente, y les metemos dentro un trozo de sobrasada, un trozo de butifarrón, dos piñones y una pasa. Lo hacemos con todos los tordos.
Sacamos de la olla las hojas de col y las ponemos en un colador.
Cogemos una hoja de col, ponemos uno de los tordos en un extremo y lo vamos envolviendo con la col. Si los extremos de la col sobresalieran demasiado los doblamos sobre el centro. Como si hiciéramos un paquete. Una vez hecho lo atamos con un hilo bramante.
Hemos de hacer 12 paquetes.
En este momento ponemos una sartén al fuego con abundante aceite y, cuando está caliente, vamos introduciendo los tordos envueltos en la col.
Mientras se calienta el aceite añadimos el caldo a la olla, para que se vaya calentando.
Freímos cada paquetito durante 3 minutos. Los giramos y los freímos 3 minutos más.
Una vez fritos, los sacamos de la sartén y los vamos incorporando a la olla de barro en la que tenemos la salsa.
Cuando ya los hemos frito todos y los hemos incorporado a la olla añadimos a la salsa unas cuantas pasas y piñones.
También incorporamos las setas que hemos cortado en pequeños trozos.
Dejamos que se vaya haciendo a fuego suave.
Lo removemos y damos la vuelta a los paquetitos de vez en cuando.
Hay que estar atentos para evitar que se pegue y añadir un poco más de caldo o agua si viéramos que se seca demasiado.
Lo tenemos a fuego lento entre una hora y una hora y cuarto. El tordo ha de quedar tierno.
Servimos y a disfrutar.
El vino elegido para la ocasión ha sido un crianza “Pere Seda”. Elaborado con Cabernet Sauvignon, Merlot, Syrah y Callet. Embotellado por Pere Seda S.L. (Manacor-Illes Balears).
Bon profit!
Mmmmm…. Un estupendo plato de cazadores