El amaretto es un licor en el que se combinan el dulzor de los huesos de albaricoque con el amargo de las almendras los cuales están acompañados por alcohol puro, azúcar caramelizado y la esencia de diecisiete plantas y frutas aromáticas entre las que destaca de forma especial la vainilla, aunque tiene también melocotón (durazno) y cereza. Su graduación alcohólica suele rondar los 25 grados y no supera en ningún caso los 30.
El amaretto tiene su origen en Saronno, una pequeña localidad cercana a Milán, Italia; de ahí que se lo conoce como amaretto di Saronno. Cuenta la leyenda que en 1525, el pintor Bernardino Luini, discípulo de Leonardo da Vinci, recibió el encargo de pintar un fresco de la Madonna en Saronno. Para ayudarse, Bernardino Luini contó con la ayuda de la hija de la dueña de una posada que le sirvió de modelo. Al parecer pasados los meses la joven se enamoró del pintor y como muestra de su amor y agradecimiento hacia él, le preparó una bebida con productos naturales que tenía en su jardín. Esta prueba de amor fue ofrecida a Bernardino quien llevó esta bebida fuera de Saronno y la dio a conocer por toda Italia.
De ahí viene también el hecho de que el amaretto sea conocido como uno de los licores más afrodisiacos. La receta fue pasando de generación en generación hasta que casi tres siglos más tarde, en 1817, se empezó a comercializar por parte de amaretto di Saronno Originale Licor, que aún hoy en día sigue siendo el número uno en el panorama mundial tanto en la fabricación como en la comercialización de este licor. Desde entonces la receta se ha mantenido sin muchos cambios haciendo del amaretto un licor de original sabor.
Si el licor es de una originalidad excepcional, su envase también lo es. Al principio de la comercialización del amaretto la botella iba con los años cambiando de diseño hasta que un artesano del cristal de Murano diseñó la botella cuadrada recortada en los ángulos que se ha convertido en todo un símbolo en Saronno y en toda Italia.
Fuente: http://es.wikipedia.org/wiki/Amaretto
INGREDIENTES:
– 250 gramos de almendra molida
– 100 gramos de azúcar
– 5 huevos
– 150 gramos de margarina fundida (o mantequilla)
– 70 ml. de amaretto
– La ralladura de un limón
– Azúcar glas para espolvorear
ELABORACIÓN:
Mezclamos las yemas con el azúcar y batimos bien.
Fundimos la margarina (o mantequilla) y la incorporamos a la mezcla anterior. Seguimos batiendo.
Seguidamente vamos añadiendo la almendra molida, la ralladura de limón y el amaretto. Seguimos batiendo hasta que esté todo perfectamente integrado.
Montamos las claras a punto de nieve y las vamos incorporando a la mezcla. Lo hacemos poco a poco, con movimientos envolventes, e integrándolas en la masa con una espátula.
Ponemos un papel de hornear ligeramente engrasado en un molde de 23 cm.. y vertemos la masa.
Horno precalentado a 180º, calor arriba y abajo, con el turbo, unos 32 minutos.
Sacamos del horno, dejamos enfriar y desmoldamos.
Espolvoreamos con azúcar glas y listo para ser degustado.
Esta receta la he visto en el blog de recetas de cocina menorquina “Ses cuinetes d’Ague”. Os recomiendo una visita a sus muy interesantes páginas.
Bon profit!
Estis bizcochos con almendra suelen ser muy buenos, y con este toque de Amaretto, habrá que probarlo sin falta.