INGREDIENTES:
(Para 2 personas)
•½ pollo troceado
•1 cebolla
•300 gr. de champiñones
•6 o 7 almendras tostadas
•1 huevo duro
•1 vaso de vino blanco
•¾ Litro de caldo
•Aceite
•Sal
•Pimienta Negra
•Picada de ajo y perejil
ELABORACIÓN:
Se fríen los trozos de pollo en una olla de barro con abundante aceite, se van removiendo y una vez hechos se sacan y se reservan en una fuente.
En la misma olla, de la que hemos retirado algo de aceite, incorporamos la cebolla, que hemos cortado finamente. Fuego lento y que se vaya pochando.
Cuando la cebolla está en su punto, añadimos los champiñones, que hemos cortado a láminas. Vamos removiendo y posteriormente incorporamos una abundante picada de ajo y perejil y el vasito de vino blanco. Incorporamos el pollo. Dejamos que se vaya haciendo unos 5 minutos.
Ahora añadimos caldo, sin que cubra totalmente los trozos de pollo, y dejamos que se vaya haciendo, mejor tapado y a fuego lento, durante unos 20 minutos. Si fuera necesario añadimos algo más de caldo.
Finalmente, añadimos las almendras bien picadas y el huevo duro que hemos cortado en trocitos muy pequeños. Aguantamos unos minutos, removiendo de vez en cuando, y ya está listo.
Un buen acompañamiento es el arroz blanco, pasado en una sartén con un poco de aceite y un diente de ajo a trocitos, o unas buenas patatas fritas.
Bon profit!
Tiene una pinta estupenda, habrá que problarlo.