INGREDIENTES:
- 4 tacos de bacalao desalado congelado
- 6 – 7 dientes de ajo
- 1 guindilla roja
- Aceite de oliva 0,4º
ELABORACIÓN:
El día antes descongelamos el bacalao y, si los tacos son muy grandes, los partimos por la mitad.
Empezamos poniendo abundante aceite en una sartén. Calculamos la cantidad teniendo en cuenta que cuando pongamos el bacalao ha de quedar prácticamente cubierto.
Pelamos los ajos, troceamos la guindilla y los introducimos en la sartén con el aceite que hemos puesto a fuego muy, pero que muy suave. Hemos de confitarlos, no freírlos. Si viéramos que el aceite se calienta demasiado, lo retiramos del fuego un rato.
Yo he tardado casi 40 minutos en el proceso de confitar los ajos. Solo se trata de tener paciencia y de controlar la temperatura del aceite.
Según Ibai Karrera, cocinero autor de esta receta, “cuando confitamos un alimento deberíamos ser capaces de poder meter un dedo en el aceite mientras se cocina. Si no podemos es que lo estamos friendo y no confitando”.
Transcurrido el tiempo y ya con los ajos blandos y doraditos los retiramos y reservamos.
En el mismo aceite introducimos los trozos de bacalao (que han de estar bien secos), con la piel hacia arriba y confitamos durante unos 10 minutos. El tiempo puede variar según el tamaño de los tacos de bacalao.
Mientras se confitan irán soltando la gelatina que tienen bajo la piel, en forma de pequeñas bolitas.
Retiramos los trozos de bacalao y los reservamos en una bandeja donde todavía soltarán algo más de gelatina.
Dejamos que el aceite se enfríe ligeramente. El fondo estará lleno de bolitas de gelatina.
Con un cucharón retiramos el aceite procurando dejar la capa de gelatina que se encuentra en el fondo. Con ella haremos el pil pil.
Ponemos la gelatina que nos ha quedado en la sartén en una cazuela ancha que ponemos a fuego moderado.
Apoyamos un colador grande en el centro, incorporamos un poco de aceite del que hemos utilizado para confitar los ajos y el bacalao, y empezamos a mover el colador de forma circular sin levantarlo.
Veremos que enseguida se empezará a formar el pil pil. Añadimos, sin dejar de mover el colador, un poco más de aceite y también el líquido que han soltado los tacos de bacalao que tenemos reservados en una bandeja.
Vamos repitiendo el proceso hasta obtener la cantidad de pil pil que nos interese.
Cuando ya tenemos la cantidad suficiente introducimos los trozos de bacalao en el pil pil, esta vez con la piel hacia abajo y cocinamos un par de minutos. Más que nada para que el bacalao se caliente.
Una vez caliente servimos dos trozos por persona, los acompañamos de abundante salsa y encima de cada trozo ponemos 2 ajos confitados y unos trocitos de guindilla.
Y listos para ser degustados.
Esta excelente receta la he encontrado en https://ibaikarrera.wordpress.com/. Recomiendo una visita a su blog, donde aparte de ésta encontrareis muchas otras recetas totalmente apetecibles.
Bon profit!
Sencillamente extraordinario. El «truco colador» no falla. El mejor pil pil que he comido.