MIGUELITOS

       Los Miguelitos son unos pastelillos típicos de la localidad albaceteña de La Roda hechos a base de un fino hojaldre, rellenos de crema pastelera y espolvoreados con azúcar glas

      Manuel Blanco López fue el creador, alrededor de 1960, del tan preciado y valorado pastel. Cuenta la historia popular que Manuel Blanco lo dio a probar a uno de sus buenos amigos, llamado Miguel Ramírez, conocido popularmente como Miguelito. La valoración de éste fue tan positiva y apreciativa que Manuel Blanco decidió bautizar dicho pastel con el nombre de su buen amigo, pasando así a denominarse Miguelito. Aunque también cuentan que el bautismo no fue tan rápido, sino que Miguel Ramírez en una de sus muchas visitas a Manuel Blanco le insistió en qué nombre pensaba darle a ese nuevo pastel de paladar tan exquisito, a lo que Manuel Blanco le contestó «pues, mira, como tú, Miguelito».

      El Miguelito original llevaba un baño de azúcar, un glaseado con el que se untaba todo el pastel y cuyo baño almibarado había de hacerse de uno en uno. Posteriormente, Roque Andrés Navarro de la confitería La Moderna, sustituyó el baño glaseado con un espolvoreado de azúcar glas, en definitiva un acabado más rápido y menos trabajoso. Fue este Miguelito el que se haría famoso y el que hoy conocemos todos.

      Fuente: http://www.miguelitosdelaroda.info/index.html

INGREDIENTES:

• 1 placa de hojaldre
• Azúcar glas
• Crema pastelera

Para la crema pastelera:

• ½ litro de leche
• 3 cucharadas sopera de leche fría
• 3 yemas de huevo
• 5 cucharas soperas de azúcar
• 2 cucharas soperas de maicena
• 1 cucharada sopera rasa de harina
• 1 corteza de limón

ELABORACIÓN:

      Empezamos preparando la crema pastelera de la misma manera que la preparamos para los cremadillos:

     Se pone al fuego una olla con el medio litro de leche, 3 cucharadas de azúcar y la corteza del limón.

    Mientras, se mezclan en un recipiente las yemas de huevo, el resto de azúcar, la maizena, la harina y la leche fría (la leche siempre al final), todo bien disuelto para que no haga grumos (yo utilizo un colador para ir incorporando la harina y la maizena).

    Cuando la leche empieza a hervir se coge un poco con un vasito y se va vertiendo, muy poco a poco, en el recipiente en el que hemos disuelto los ingredientes anteriores, con cuidado y removiendo para evitar que las yemas cuajen y se formen grumos.

   Finalmente se vierte este contenido en la olla de la leche y, a fuego suave, se remueve continuamente con una cuchara de madera durante 5 minutos.

    Se aparta del fuego y se vierte en una fuente para dejarla enfriar antes de utilizarla. (Si se va a emplear al día siguiente, se guarda tapada, una vez fría, en la nevera pero se debe quitar la corteza de limón pues de lo contrario el sabor a limón sería demasiado intenso).

      Cuando tenemos la crema pastelera lista para ser utilizada empezamos la preparación de los Miguelitos.

      Precalentamos el horno a 200º. Ponemos un papel de hornear en la bandeja del horno y empezamos a cortar la placa de hojaldre en pequeños rectángulos de 4 x 5 cm. aproximadamente.

      Una vez cortados los vamos colocando en la bandeja de hornear. Nos cabrán unos 25 en cada bandeja.

      Una vez los tenemos cortados los introducimos en el horno.

     Necesitarán unos 15 minutos. Los 12 primeros con calor arriba y abajo pero sin el turbo. Cuando falten 3 minutos ponemos el turbo.

      Sacamos del horno y los vamos colocando sobre una rejilla para que enfríen.

      Una vez fríos los cortamos por la mitad con un cuchillo de sierra.

      Los rellenamos con la crema utilizando una manga pastelera (o con una cucharita si no tenemos manga pastelera).

      Una vez rellenos los cerramos y los vamos colocando en una bandeja.

      Cuando los tenemos todos en la bandeja los espolvoreamos generosamente con azúcar glas.

       Resultan excelentes y del tamaño adecuado para comerlos de un solo bocado.

      Con la cantidad de crema que hemos preparado podremos rellenar poco más de 30 Miguelitos.

      Bon profit!